Es una realidad que el vídeo en redes sociales llegó para quedarse. Hoy en día, el 60 % de las marcas utilizan contenido en video para conectar con una audiencia de entre 18 y 33 años, lo que demuestra su relevancia en el ámbito digital. El auge del vídeo desde 2018 es indiscutible y sigue en constante crecimiento.

Cuando los usuarios realizan búsquedas en Google, la mayoría de los resultados en video provienen directamente de YouTube. Por ello, es esencial captar la atención de los espectadores desde los primeros segundos. Los videos con menos texto y en los que las personas hablan de manera directa generan mayor impacto y engagement.

El vídeo marketing continuará en ascenso. Solo en YouTube se consumen mil millones de horas de vídeo al día, y en plataformas como Facebook, Instagram y TikTok el contenido audiovisual es el protagonista. En el sector salud, el video se convierte en una herramienta clave para educar a los pacientes, generar confianza y fortalecer la reputación de clínicas y profesionales.

Algunas estrategias efectivas de vídeo marketing incluyen:

• Videos educativos: Explicaciones sobre procedimientos médicos, consejos de salud y testimonios de pacientes.
• Contenido corto y dinámico: Los «Nuggets«, videos breves e informativos que fortalecen la relación con el público sin necesidad de promoción directa.
• Subtítulos y adaptación a móviles: Más de la mitad de las reproducciones de vídeo se realizan en smartphones, y el 85 % de los usuarios consumen contenido sin sonido, por lo que añadir subtítulos mejora la accesibilidad y el alcance.

Además, plataformas como Facebook e Instagram favorecen la visibilidad del contenido en video, recompensando a las marcas que suben material audiovisual original. Con un 81 % del tráfico digital proyectado para ser de video en los próximos años, es crucial que las empresas de salud se adapten a esta tendencia para mantenerse competitivas y conectar con las nuevas generaciones.